Este vídeo, escrito, dirigido y patrocinado por Jesús Jiménez Cossío a mediados de los años 80 con el objetivo de dar a conocer esta nueva raza, tiene una duración de 55 minutos aproximadamente y su contenido está dividido en cuatro apartados:
1. Presentación de Jesús Jiménez Cossío, criador de los ejemplares expuesto en este vídeo.
2. Breve historia del GIBOSO ESPAÑOL.
3. Estudio y comentarios sobre el Standar del GIBOSO ESPAÑOL. Cualidades y defectos.
4. Estudio comparativo entre el GIBOSO ESPAÑOL y el GIBBER ITALICUS.
En 1975/1976 ya estaba conseguido el Giboso prácticamente como lo conocemos en la actualidad. Criadores de Sevilla, Cádiz y Tenerife empezamos a presentar nuestros canarios en los concursos, pero obtenían muy baja puntuación pues se enjuiciaban con la planilla del Gibber Italicus, raza reconocida por FOCDE y por la OMJ/COM, que era la que más se asemejaba, si bien hoy todos los criadores que nos dedicamos a estas razas conocemos las características diferenciadoras de ambas. En ese momento empezamos a plantearnos el reconocimiento de nuestro canario como una nueva raza tanto a nivel nacional como a nivel internacional, si bien quedaba un largo recorrido aún por delante.
En diciembre de 1979, con motivo de la celebración del Concurso de Canaricultura organizado por la Asociación Ornitológica La Isla, de San Fernando (Cádiz), en el que exponíamos ejemplares de estos canarios, nos pusimos en contacto con el Sr. Bigas, Presidente en ese momento de la Comisión Técnica de Postura del Colegio de Jueces- FOCDE, que se encontraba enjuiciando en el concurso. El Sr. Bigas nos animó a tratar de conseguir el reconocimiento de ese tipo de canarios, pues existían notables diferencias con todas las razas existentes. El primer paso para ello era la confección de un estándar. Después de varias reuniones y consultas telefónicas con los aficionados de Tenerife y San Fernando, en Sevilla confeccionamos la planilla de enjuiciamiento, con su conformidad. En un principio los aficionados de Sevilla, bautizamos a esta raza en ciernes como Giboso Sevillano, si bien y con razón, los aficionados tinerfeños mostraron su disconformidad. En noviembre de 1980 hubo una reunión en Tenerife a la que asistieron el Sr. Bigas, varios aficionados tinerfeños y yo, en representación de los aficionados sevillanos, en la que tratamos de dirimir las pequeñas divergencias, y en especial la relativa a la denominación. En la reunión acordamos por unanimidad la definitiva denominación de Giboso Español. Aunque los trámites iniciales se hicieron con el primer nombre, e incluso con ese nombre se dio a conocer en revistas nacionales e internacionales, el procedimiento continuó ya con el definitivo nombre de Giboso Español.
Inmediatamente, en representación de los criadores del Giboso Español inicié los contactos con D. Alfonso Babra, Presidente en funciones en ese momento del Colegio Nacional de Jueces- FOCDE, para que se hicieran las oportunas gestiones para el reconocimiento a nivel nacional de esta nueva raza. En el Campeonato Ornitológico de España-FOCDE celebrado en Valencia en diciembre de 1980 se presentaron por vez primera, y fuera de concurso, cincuenta Gibosos para ser enjuiciados por jueces españoles. Se trataba de ejemplares noveles, pertenecientes a criadores de Sevilla, muchos de los cuales eran de mi propio aviario. El 8 de diciembre de ese mismo año fue aprobado a nivel nacional con el nombre de Giboso Español. Hay que señalar en este punto que la normativa FOCDE de ese momento no requería la presentación de ejemplares durante tres años consecutivos para su reconocimiento, como en la actualidad.
Una vez reconocido a nivel nacional, teníamos que empezar con los pasos para el reconocimiento internacional. En 1981, la Comisión Técnica de Postura, sin consultar con los aficionados, envió a la OMJ una planilla del Giboso diferente a la que se había aprobado y con la que habían sido enjuiciados los canarios en su reconocimiento en Valencia. Es cierto que las variaciones eran mínimas y no afectaban al fenotipo del canario, pero los aficionados no estuvimos de acuerdo con ella. Para resolver esas discrepancias, el 12 de diciembre del año siguiente, con motivo del Campeonato Ornitológico de España-FOCDE, celebrado en Barcelona, mantuvimos una reunión presidida por el Sr. Babra, a la que asistieron el presidente de la Comisión Técnica de Postura y una representación de aficionados de Sevilla, Cádiz y Tenerife, ratificándose el estándar definitivo del Giboso Español, que fue el mismo que se utilizó para su reconocimiento nacional un año antes. Ese estándar es el que sigue en vigor en FOCDE, aunque como analizo en ENLACE AL ESTÁNDAR, la OMJ, a propuesta de COM-E modificó ligeramente el mismo, cometiendo en mi opinión un error.
Fue por tanto el Campeonato Ornitológico de España de Barcelona, en 1981, el primer concurso en el que la raza se presentaba de manera oficial. Para el reconocimiento internacional quedaba aún un largo camino, y para no faltar a la verdad, tengo que decir que todo el trabajo, esfuerzo y coste económico para el reconocimiento internacional lo hice yo personalmente: preparé un dossier para enviarlo a COM a través del Colegio Nacional de Jueces, compuesto por la planilla aprobada, fotografías, radiografías, un estudio comparativo entre el Giboso Español y el Gibber Italicus, y varias láminas en dos idiomas; envié artículos de propaganda y fotografías a todas las revistas de Ornitología de Europa, para que los publicasen, y así sucedió; envié Gibosos fuera de concurso a varios concursos internacionales, entre ellos el prestigioso de Reggio Emilia; e invité a visitar mi aviario a muchos jueces nacionales de postura y a jueces OMJ de Italia, Francia y Bélgica. En noviembre de 1983, visitó mi aviario, invitado personalmente por mí, el Presidente en ese momento de COM, Sr. Luciano van Roelen y su sra, y tuvo ocasión de comprobar personalmente las diferencias entre el Giboso y el Gibber, pues a modo de comparativa, en 15 jaulas de mi aviario puse un Giboso de mi propiedad y un Gibber procedente del aviario de mi buen amigo italiano D. Ignazio Petaroscia, campeón del mundo con esa raza varias veces.
Tal y como recogía la normativa COM, para su reconocimiento internacional hubo que presentar los Gibosos durante tres Campeonatos Ornitológicos consecutivos. En 1982 se presentaron 4 ejemplares de mi propiedad en Roeselare (Bélgica). En 1983, se presentaron 6 Gibosos, también de mi aviario, en el Mundial de Piacenza (Italia). Y finalmente, en 1984, durante el Campeonato Ornitológico celebrado en Pirmasens (Alemania) fueron presentados 12 ejemplares, todos seleccionados por mí, de los cuales 2 eran de D. Antonio Rodríguez Acuña, 2 de D. Juan Antonio García Amuedo y 8 de mi aviario. Durante esos tres Campeonatos Mundiales, los canarios fueron enjuiciados por 29 jueces internacionales de Italia, Bélgica, Alemania, Holanda, Inglaterra, Suiza, Checoslovaquia y Francia, emitiendo su juicio favorable 21 de ellos, desfavorable 7 y existiendo una única abstención. Una vez conocido el informe técnico de los jueces, el 24 de enero del 1984 en el Congreso OMJ/ COM, el presidente general de la COM, Sr. L. Van Roelen, anunció que el Giboso Español era aceptado como nueva raza de canario de postura. En el Campeonato Mundial de 1985, celebrado en Zutphen (Holanda), el Giboso Español concursó por primera vez de modo oficial, y ha estado presente desde esa fecha en todos los Campeonatos Mundiales.